Centramos el liderazgo de los más afectados
Creemos que la inclusión no puede ser una ocurrencia tardía, y que nuestra diversidad, experiencias personales y voces son nuestras mayores fortalezas.
Con demasiada frecuencia, las comunidades de color, los jóvenes, los discapacitados, las personas LGBTQ y las personas con bajos ingresos no son escuchadas, defendidas y excluidas del poder de decisión.
Cuando las personas más afectadas por un problema tienen el espacio, los recursos y el apoyo necesarios para liderar, se producen resultados poderosos.
Por eso apoyamos el liderazgo de las comunidades que están en el centro de la opresión pero se encuentran al margen de la filantropía. Las mujeres jóvenes de color, los jóvenes cuir y trans de color, los jóvenes discapacitados y las personas con bajos ingresos saben mejor que nadie lo que necesitamos y tienen una gran capacidad de liderazgo.